Negocio redondo

Aunque en las taquillas del Omnilife se informó ayer que ya no había boletos para el Clásico, en las manos de la reventa hay miles, y un solo revendedor espera ganar un millón de pesos de la venta de estas entradas, según revela el periódico Reforma.

“Me quedan mil boletos, este partido es para ganarse un millón (de pesos) sin pedos, ¿tú crees que por un puto boleto me voy a quemar?, apuntó a Reforma.

El diario habló con César Celaya Santillán, quien presumía en Facebook tener mil entradas, vendiendo el boleto más barato en 650 pesos, cuando originalmente costaba 220 pesos. El tráfico ilegal de boletos existe gracias al contubernio entre los revendedores y personal de taquilla que trabaja en el Estadio, quienes les venden los boletos antes de que salgan al público.

"A nosotros nos los pasan por más lana los taquilleros, el taquillero nos los vende a nosotros y ya se llevan una lanita. El taquillero, (yo) estaba sacando cuentas y se ganó más de 600 mil por lo que nos pasó todo. Es su finanza y nosotros a tratar de dobletear", explicó el revendedor.

LO Q SERIA EL ESTE GORDI EN LA SALADA ¡¡¡ JAJAJA